ENTREVISTA A RAÜL ROMEVA EN LA BBC
“Bayard, el caballo de los débiles”.
Pineda Navajas Antonio T.
CARLES FRANCINO
“Necesito un desahogo,
necesito contarles algo muy personal y apelo a su paciencia y a su comprensión
para poder hacerlo. Imagino que muchos de ustedes habrán visto, o al menos les
sonará, aquella película protagonizada por Bill Murray, película fantástica por
cierto... que se titulaba "Atrapado en el tiempo". La historia de un
periodista gruñón, un cascarrabias... condenado a revivir cada mañana el día de
la marmota, esa tradición que tienen en Estados Unidos de que un animalito
pronostique cómo será el invierno. Bueno, pues he de confesarles,
sinceramente... y sé que es un tema muy serio... que yo tengo hoy la misma
sensación -o muy parecida- con la Diada de Catalunya, con las cosas que se
dicen en Catalunya, con las que se dicen fuera,... y... ahí va el desahogo:
estoy harto.
Harto además de sentirme
escrutado en todas partes. Cuando estoy en Madrid por unas cosas, cuando estoy
en Catalunya por otras. Unos me consideran -y me lo han dicho, me lo dijo la
otra noche un exministro- "independentista radical". ¡Tócate el pie!
Otros me ven como "españolista", como un catalán poco auténtico.
¡Vaya usted a saber por qué! Esto ya me lo decían algunos cuando trabajaba en
TV3. Y al final yo... creo que como otros muchos me veo casi como en tierra de
nadie... miro el panorama, pero me resisto a ser encuadrado en uno de los
bandos. No por ninguna falsa equidistancia sino porque no me da la gana, porque
es que además puedo encontrar argumentos con los que estar de acuerdo en todas
partes. Y eso debería ser una ventaja, no un inconveniente.
Sin embargo, lo que no
encuentro es una respuesta política a este atolladero, alguna vía inteligente
para canalizar emociones, sentimientos, aspiraciones... Nada. Y por eso estoy
harto; harto y cabreado. Y me apunto a algo que decía el escritor Javier Cercas
hace casi un año: "Vamos hacia un cataclismo, el cataclismo puede
evitarse. Pero la verdad -y hago mía la frase- la verdad es que no estoy seguro
de no haberme puesto a escribir sólo para que, dentro de 20 0 30 años cuando mi
hijo me pregunte por qué no paramos un desastre que estarán pagando ellos, yo
al menos pueda enseñarle este artículo". O en mi caso pasarle esta
grabación por la que ya ahora mismo algunos me estarán poniendo a parir en las
redes sociales. Es lo que hay”.
PEDRO TARACENA
Estoy de acuerdo con Carles Francino, pero me apetece
aportar un pensamiento mío, también, para que mis hijos y nietos puedan conocer
en qué consistió el debacle que ellos
padecerán. Además es mi deseo aportar mi punto de vista por la experiencia
vivida de la dictadura en Madrid y haber vivido la muerte del dictador y la transición
en Barcelona. También frecuentaba el País Vasco mientras en Burgos se celebraba
el Consejo de Guerra que enjuiciaba a los etarras.
El conflicto catalán se trató de canalizar y encajar en
la Constitución de la República Española en su Título Primero y posteriormente en el Congreso
de los Diputados. El Golpe de Estado provocó la Guerra Civil y la dictadura,
criminal como todas las dictaduras, hasta la muerte de Franco. La Transición
del régimen despótico a la democracia, sin condenar el genocidio franquista y
la persecución del nacionalismo vivo en Catalunya y Euskadi, dejó impune los
delitos cometidos por el general traidor, golpista y criminal y sus lacayos;
acallando la posible involución que podría producirse si no se escribía la
Constitución al dictado de los militares, los obispos, los caciques y los
franquista en activo. Los demócratas venidos de las cárceles, del exilio y de la
clandestinidad, vendieron su derecho a condenar los delitos de lesa humanidad por el plato de lentejas
y las migajas de poder, que les permitieron los franquistas a cambio.
El status quo creado
por la Transición ha llegado hasta nuestros días. El franquismo enquistado en
el Partido Popular, el bipartidismo y las derechas periféricas, han constituido
La Casta. Es decir, el Régimen del 78: nocivo, perverso, corrompido y cómplice
del consenso hipócrita y fratricida. Es obvio que nadie niega el progreso y
avance de España, pero ha sido tan frágil que su propia corrupción le ha hecho
zozobrar. Las consecuencias del status quo mencionado es la reconciliación
aún pendiente del pueblo español. Mejor dicho los ciudadanos que viven en el
forzado Reino de España. Con este bagaje y en este marco de ilegitimidad legal
y moral llegamos al 27 se septiembre de
2015.
Ninguno de los partidos contaminados con el Régimen del
78 está capacitado para aportar ninguna solución creíble. Aunque la sensatez
nos dice que es preciso abandonar el dogmatismo de la Constitución Española,
invalidada por la realidad del siglo XXI. Hay que analizar en profundidad los
valores Nación, Patria, Bandera, Himno Nacional, Unidad Nacional, Lengua
Materna, Costumbres y Cultura. Son magnitudes que pertenecen al universo de las
emociones, imposible de establecer en un marco jurídico, legal o legítimo. Que
de alguna manera están al servicio del viejo lema: Dios, Patria y Rey.
Constitución de la República Española 1931:
Artículo 1º España es una República democrática de
trabajadores de toda clase, que se organiza en régimen de Libertad y de Justicia.
Constitución Española 1978:
PREÁMBULO
La Nación española, deseando establecer la justicia, la
libertad y la seguridad y promover el bien de cuantos la integran, en uso de su
soberanía proclama su voluntad de:
Artículo 1
España se constituye en un Estado social y democrático de
Derecho, que propugna como valores superiores de su ordenamiento jurídico la
libertad, la justicia, la igualdad y el
pluralismo político.
Las nuevas formaciones políticas estás hirviendo en otro
cultivo de valores, tales como: República, en el sentido clásico del térmico.
Democracia Real, es decir, “el gobierno del pueblo para el pueblo”, pero no
cada cuatro años, sino todos los días. Libertad e Igualdad entre mujeres y
hombres, grandes y pequeños. Una reforma constitucional desterrando de la actual
Constitución todas las perversiones franquistas que han logrado fosilizarla. Aunando
esfuerzos para confederarse no solamente con los pueblos de España sino con
Europa.
Nosotros, los habitantes de este país debemos convertirnos
en el motor legítimo, legal, social, moral y democrático de Europa, y desbancar
a los caciques que han convertido al continente en la Europa de los mercaderes.
Y lo que es más grave, la mayoría de los gobiernos de la Unión Europea, no voy a llamarles “lameculos”, pero sí lacayos de quien se cree la nueva Carlomagno, cuando es el excremento de Bayard, su
caballo…
ENTREVISTA A RAÜL ROMEVA EN LA BBC
ENTREVISTA A RAÜL ROMEVA EN LA BBC
Pedro totalmente de acuerdo contigo.
ResponderEliminarabrazos
Jordi