Por Pedro Taracena Gil
En España no existe la
ultraderecha similar a la ultraderecha de Europa, porque la derecha
española tampoco tiene nada que ver con
la derecha europea. Y sobre todo porque su génesis comenzó habiendo anclado sus
raíces en el fascismo, no en una democracia cristiana o en una derecha
conservadora laica, como en el resto de Europa. La actual derecha española
congregada en torno al Partido Popular, tiene su origen en el golpe de estado
contra la República del 18 de julio de 1936.
En esa fecha el Ejército, la
Iglesia, el Capital y los Caciques, se agruparon con el propósito de derribar
al régimen republicano y restaurar en el poder a los Borbones. No obstante, es
preciso aclarar que Falange Española, versión hispana del fascismo italiano,
fue en muchos episodios de la Guerra Civil y de la Dictadura, el brazo ejecutor
de muchos de sus crímenes.
La dinastía del Partido Popular
comienza, cuando dentro del régimen se forman bajo en férreo control del
Caudillo de España, unas asociaciones políticas que maquillaban un poco la
llamada democracia orgánica. En el
Gobierno estaba Manuel Fraga, falangista y miembro destacado del partido único,
Movimiento Nacional. Esta asociación se
denominaba Alianza Popular. Con la democracia se legalizó como partido político
con el mismo nombre. Muerto el dictador, Fraga fue nombrado Ministro de la
Gobernación en el primer Gobierno de Juan Carlos I, siendo presidente del mismo
Arias Navarro.
Fraga nombró como sucesor a
José María Aznar y éste cambió el nombre de la formación por el de Partido
Popular. La ideología de Franco, Fraga y Aznar es la misma. Es decir, lejos de
condenar la dictadura, una ley de amnistía dejó impune el genocidio franquista. Los
franquistas populares abrazaron una Constitución, hecha bajo la tutela de los
mismos: El Ejército, la Iglesia, la Oligarquía económica y los caciques de
siempre. No necesitaban importar nada de Europa, en España le sobraban
elementos para configurarse como una fuerza conservadora de derechas y en comparación
con los regímenes democráticos y laicos de nuestro entorno, se convertía en
extrema derecha, sin muchos esfuerzos. Las únicas políticas de derechas y de
izquierdas que se han hecho en España han sido llevadas a cabo por la
izquierda. El centro existió, pero se extinguió con el partido que lo sustentaba,
Unión del Centro Democrático, fundado también por franquistas. La derecha en España apenas ha desarrollado los derechos constitucionales.
¿Por qué no existe de forma
titular la extrema derecha? La respuesta es que existe pero fusionada con la
derecha oficial. El Partido Popular goza de todas las cualidades que gozaba la
dictadura franquista: Nacionalcatolicismo, nacionalsindicalismo, tutela militar
y dominio de la oligarquía económica y del oligopolio energético. España es un
estado confesional encubierto dentro de una apariencia de aconfesionalidad,
cuando debería ser un estado laico. La extrema derecha española ha fosilizado
los valores constitucionales de nuestra Carta Magna. Rajoy, es el caudillo
heredero legítimo del franquismo, y cubre bajo su manto de armiño, la España,
Una, Grande y Libre, que Franco tanto ambicionó. La ultra derecha no se la
espera porque habita entre nosotros desde 1936.
Es cierto que todos los medios
de comunicación están homologados con los valores de la Santa Transición, y se jactan
de que en España sólo haya una derecha civilizada… Y eso es ciertamente,
mentira…
ULTRADERECHA EN ESPAÑA
ÁLBUM DE LA ULTRADERECHA EN ESPAÑA
GÉNESIS DE SU FORMACIÓN
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